Ayudándome de la frase del conocido Walt Disney, he optado
por enfocar el tema de las luces y las sombras a la vida en general. En relación
con la frase “La vida está compuesta
de luces y sombras, fingir que no hay sombras sería falso” mi interpretación
ha sido la siguiente: Todos deseamos tener una vida buena, que se porte bien
con nosotros y en la cual tengamos que lidiar con los menos problemas posibles,
lo que vendría siendo una vida que irradiase luz, paz, armonía y donde la alegría
y tranquilidad estuviesen a la orden del día. Pero, ¿qué ocurre cuando todo eso
comienza a tener tonos sombríos y nuestra vida se ve invadida por una oleada de
sombras? Si bien es cierto que tratamos de luchar, en la mayoría de los casos, con
todos nuestros problemas y por lo general intentamos aferrarnos a cualquier
rayo de luz que nos aliente a conseguir eso y esto sucede cada día, pues las
luces y sombras residen en nuestra vida y parten muchas veces de nosotros
mismos, debido a que en cada uno hay luces que debemos potenciar (cualidades) y
sombras con las que debemos coexistir y que no deben ser ningún impedimento para
avanzar tanto y hasta donde queramos. Y con todo, volviendo al tema en cuestión
y propugnando la idea de Walt, ignorar todo esto, fingir que sólo disponemos de
luz y buenas cosas sería plenamente falso y no estaríamos haciendo otra cosa más
que engañarnos a nosotros mismos y acumular sombras hasta que no hubiese luz
que pudiera alumbrarnos.
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